jueves, 3 de noviembre de 2011

PUNTOS DE VISTA



Lo que vemos en la imagen anterior es lo que vio el maestro Salvador Dalí un día de 1935, cuando abrió uno de los cajones de su escritorio en busca de unos papeles.
A primera vista, pensó que se trataba del bosquejo de un rostro realizado por Picasso. Le pareció que el estilo se correspondía con el del gran artista malagueño.

Pero luego giró la imagen y se dio cuenta cabal de lo que allí estaba representado:



No se trataba de un bosquejo de Picasso, sino de una simple postal de época, que muestra una choza y nativos africanos.

Le pareció tan interesante el truco que le había jugado su propia mente, que decidió llevar consigo la postal y comentar el episodio en las reuniones de amigos y colegas.
Así fue que le relató lo acontecido a André Breton, el gran teórico del surrealismo, quien le dijo que el rostro le hacía recordar al Marqués de Sade.

La idea gustó sobremanera a Dalí, que se puso entonces a trabajar en la creación de un cuadro que reflejara la falsa percepción sufrida.
El resultado es "Rostro paranoico", que data de 1935 y luce así:



O sea, como una choza con nativos y árboles tras ella.
A menos que usted la gire noventa grados a la derecha y entonces lo que verá es ésto:



El efecto es, propiamente, el mismo que engañó los ojos del amigo Salvador. Pero acrecentado por la mano del artista, que ubica convenientemente los nativos para servir al truco y transforma los árboles en cabellera del marqués.

Como por arte de magia o, quizás, es que todo depende del punto de vista.

2 comentarios:

Mariolo dijo...

Hoy en día circulan varias imágenes de este estilo, que engañan, o no.

Pero sin dudas todo tiene un comienzo, y el estimado Dalí es un genio hasta para sorprenderse y sorprendernos

pelado1961 dijo...

Y todo comenzó con una postal encontrada en un cajón.
Verdaderamente, Mariolo, Dalí fue un gran genio.

Va un abrazo.