domingo, 7 de agosto de 2011

LA ARAÑITA DEL MAZDITA


No es la arañita de Martita, sino la del Mazdita. Y tampoco es una sola, sino una verdadera patota arácnida.
Resulta que Mazda, fabricante mundialmente famoso de autos, se va a ver en la obligación de revisar más de cincuenta mil coches de su modelo Mazda 6 en Estados Unidos.
¿Por qué? Por problemas causados por arañas, nada menos.




Ya sé lo que están pensando: "Manga de piojosos, hubieran pasado el plumero más seguido en los concesionarios".

Pero no, el problema no es pre-venta sino post-venta.  Allá por el año 2009, un cliente se presentó reclamando por la fractura del depósito de combustible sin causa aparente. Los ingenieros revisaron el auto de arriba a abajo, pero no encontraron pista alguna que les ayudara a clarificar el problema.

Y justo cuando pensaron que se trataba de un suceso aislado, empezaron a producirse más y más casos similares. Después de revisar minuciosamente todas las posibilidades (desde defectos en los materiales hasta sabotaje), tuvieron que aceptar una causa absolutamente insólita: telas de araña.

En efecto, tal parece que los Mazda 6 tienen un sistema de ventilación que permite el paso de arácnidos y, cuando estos bichitos construyen su tela, pueden provocar que la evaporación no se realice en la forma planificada, lo cual causa aumento de presión y fractura del tanque.

Como la excesiva presión en un tanque de combustible no es precisamente una pavada, Mazda se verá obligada a revisar más de cincuenta mil coches de ese modelo y, tras pasarles el plumerito, deberá instalarles un resorte especial que impedirá el paso a futuros arácnidos saboteadores.

Pero primero, el plumerito con perfección japonesa.


Y ahora no me vengan con que todos tienen un Mazda 6 y lo van a llevar a plumerear, manga de filibusteros depravados.

2 comentarios:

Mariolo dijo...

Que Maz da el auto que tengas, Pelado


Como unos bichitos le complicaron la vida a terribles ingenieros, eh

pelado1961 dijo...

Para mí que los japoneses andan pifiando, Mariolo.
Entre Fukushima y las arañitas, están errando feo en sus previsiones!!!!