TESOROS EN EL GARAGE

El doctor Harold Carr era, de acuerdo a sus vecinos y amigos, un tipo excéntrico.

Y la opinión quedó plenamente avalada cuando murió el buen doc.

Soltero y sin descendencia, falleció a los 89 años, legando todas sus pertenencias a sus sobrinos.

Cuando éstos abrieron el enorme garage propiedad de su tío, encontraron varios coches polvorientos entre un sinfín de estanterías con repuestos y herramientas añejas.

Lo que nunca sospecharon es que uno de esos autos era un Bugatti 57S Atalante, vehículo que data de 1937, modelo del cual apenas se fabricaron unos diecisiete ejemplares.

Los expertos indican que, puesto en subasta, puede alcanzar un precio de seis millones de libras esterlinas.

Nadie tenía idea de la existencia de ese auto, pues el doctor no lo manejaba desde 1960.

Incidentalmente, en el garage había además un Jaguar E y un Aston Martin, que también tienen su valor aunque ni se aproximan a la cotización del Bugatti (que se convertirá en el coche más caro jamás subastado).

Y los sobrinos de Harold, en vez de decir "tuve un tío medio loco", seguro que pasaron a expresarse de otra manera: "tuve un tío un tanto excéntrico.....pero qué gran persona era!!"