domingo, 1 de mayo de 2011

THE WALL, MISMO



Siempre me río de los inconsistentes esfuerzos municipales que buscan hacerme creer que esta ciudad está magnificamente administrada. Pero los que se ríen al último son los intendentes de turno, que invariablemente me cobran lo que me cobran por ser tan atrevido de tener casa y coche propios. Por lo visto, para ellos eso es el equivalente a ser un "galerudo".

Yo ya no voto. De puro "spleen político" que me ha agarrado, mire usted. Pero aún cuando votaba, ya pensaba que el intendente no debería surgir de una elección ciudadana. Al fin y al cabo, el tipo (o la tipa) no son más que un funcionario-rehén, ahí a medio camino entre sus propias promesas irrealizables, un gremio pesado y un gobierno nacional que no siempre era del mismo partido.

La medida de los logros municipales la aprendí a mis nueve años. Mi abuelo y yo solíamos recorrer las mismas seis o siete cuadras para ir a buscar a mi abuela a la iglesia. Y lo hacíamos por una calle que mostraba un empedrado de tantos años que ni el carbono-14 lograría datarlo. En uno de esos trayectos, le pregunté si algún dia esa calle estaría arreglada correctamente. Y por toda respuesta, se rió a carcajadas mientras me palmeaba el hombro, dándome a entender lo ingenuo de mi interrogante.



El tiempo le dio la razón. Pasaron cuarenta años y esa calle ni siquiera logró entrar en la categoría "pastiche", como le digo yo a las calles que mezclan material con algunas vías de tranvía y los clásicos manchones negros surgidos de parches inmemoriales. Sigue empedrada, nomás.

Lo que sí cambió (de nombre) fue una especie de rotonda-cantero que estaba en las cercanías y que ahora ha sido elevada a la categoría de "plazoleta", con cartel y todo. Claro que eso fue una trampita semántica, que muy pronto será invalidada por "los desconocidos de siempre" cuando se afanen el cartel.

Pero hasta en el primer mundo se cuecen habas municipales, que conste. Y si no me creen, vean lo que pasó en Manchester (Reino Unido).
Tiempo atrás, en el Audenshaw's Shepley Park fueron desmontados todos los juegos infantiles, que estaban deteriorados por el tiempo. Y se dijo que serían reemplazados por otros mejores, faltaba más.

Un buen día, los vecinos se encontraron con todos los "nuevos juegos" instalados. Aunque no era fácil reconocerlos a simple vista, porque consistían solamente en ésto:



"¿Y qué diablos es ese mamotreto?", me dirá usted. Ah, ya veo que no cuenta con la debida imaginación municipal, porque para las autoridades de Manchester eso es un juego infantil: un muro para que rebote la pelota.

Como siempre y como en todas partes del mundo, los desagradecidos ciudadanos exhibieron su total ignorancia en materia de planificación, espacios verdes, urbanismo y demás, cual si fuera un blasón: los muy atrevidos exigieron saber cuánto se había gastado en "la porquería esa" (léase "estructura lúdica dos-punto-cero").

Y el problema no fue tanto la pregunta como la respuesta: al parecer, la suma involucrada era tan grande como si el muro tuviera cincuenta veces el tamaño que tiene, formase parte de la escenografía de Pink Floyd y la propia banda lo hubiera inaugurado con mega-concierto incluído, interpretando "The Wall" de principio a fin.

Y yo, necio sin cura, me quejo por un empedrado que amenaza perpetuarse en el tiempo más allá de la puerta de la Ciudadela (y de las Pirámides, quizás).
Mejor lo tomo con filosofía y aquí mismo pongo un video floydiano alusivo: another brick in the empedrado....digo....wall.

5 comentarios:

Gustavo dijo...

Hace unos dias estuve por Montevideo y pude comprobar in situ como disminuyeron la indigencia.
Llegué temprano a tres cruces y en tres cuadras conté cinco indigentes.
Lo que me llamó la atención es que todos estaban durmiendo en bolsas de dormir (repartidas por el mides sin duda)
Ahora no son indigentes sino campamentistas, mataron dos pájaros de un tiro, redujeron el indice de indigencia y aumentaron el de turismo.

pelado1961 dijo...

Triste panorama el que pinta, Gustavo.
En particular, los temas de la indigencia y el aumento del número de asentamientos son muy delicados.

Saludos.

Mariolo dijo...

Lo de ese muro me mató.
La verdad que no se si en todas las partes de este mundo se cuecen o no habas; pero que se jode en todos lados, si

Ferchu dijo...

Como dijo Mariolo en todos lados se cuecen habas... Pero aca las cuecen y las exportan jeje

pelado1961 dijo...

Lo único que espero es que no estén tomando nota de la brillante idea inglesa en la IMM.